24/07/2025
Cómo es la oveja de mar, el curioso molusco luminoso que roba la luz del sol para sobrevivir

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Esta diminuta criatura marina, que se alimenta de algas, produce sus propios nutrientes mediante un inusual mecanismo. Cuáles son sus particulares estrategias de camuflaje ante los depredadores
>La Costasiella kuroshimae, conocida popularmente como “oveja de mar” por su rostro entrañable y su cuerpo cubierto de apéndices verdes, es uno de esos Según National Geographic, su descubrimiento en 1993 cerca de la isla japonesa de Kuroshima marcó el inicio de una historia donde la evolución y la belleza se dan la mano bajo el agua.
Desde entonces, este molusco diminuto también fue localizado en las aguas de Filipinas e Indonesia, siempre en íntima relación con las algas que cubren los sustratos blandos del océano.Según la revista Muy Interesante, los ojos, pequeños y juntos, se asoman entre los cerata de colores vibrantes que cubren su espalda y le dan el aspecto característico que ha cautivado a fotógrafos submarinos y usuarios de redes sociales por igual.
Tras alimentarse de las algas, la Costasiella kuroshimae es capaz de retener intactos los cloroplastos y almacenarlos en sus cerata.
Así, literalmente “roba” la maquinaria fotosintética y la utiliza para sintetizar su propio alimento a partir de la luz solar, como explica National Geographic. Según Oceana Protecting the World’s Oceans, este fenómeno proporciona doble beneficio: nutrientes directos y protección química, además de un camuflaje verde que le ayuda a pasar inadvertida ante los depredadores.Según National Geographic, su ciclo de vida resulta igual de singular que su fisiología. Siendo hermafroditas, necesitan de otro individuo para llevar a cabo la reproducción.
Tras la cópula, la Costasiella kuroshimae deposita entre 2.000 y 4.000 huevos sobre las algas, dispuestos en delicadas espirales.Durante este trayecto, los animales pasan de huevos escondidos a larvas flotantes y, finalmente, a invertebrados que habitan y transforman el color de su entorno.
Según Oceana Protecting the World’s Oceans, la especie no está formalmente catalogada como amenazada, pero su supervivencia se encuentra bajo presión por el deterioro de hábitats, la contaminación por plásticos y el cambio climático.La expansión de los residuos plásticos, especialmente microplásticos, representa otro peligro, ya que pueden obstruir tanto la boca como el sistema digestivo de estos diminutos animales y liberar toxinas potencialmente dañinas.
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